A mis verdaderos
discípulos los conoces por serlo.
Entre
vosotros, Mis ovejas, os reconocéis, veis claramente quien está Conmigo, en Mí,
y quien diciendo serlo, no lo es.
Esa capacidad que os doy, es un don precioso, una especie de instinto sobrenatural; una facultad que os permite, como a los cachorros con sus madres, seguir siempre a vuestro Dios único y verdadero.
Os permite no sentiros perdidos, en medio de la actual apostasía.
Mi Santo Espíritu, que os habita, por la fe y el bautismo, y por medio de todos Mis sacramentos, es la clave de todo.
Quien lo tiene, Me tiene.
Quien lo rechaza, aunque afirme falsamente ser de los Míos, lo sabréis más tarde o más temprano... Ya me ocupo Yo de que sea, cuanto antes mejor.
Pequeños todos, no sabéis cómo en esta época me vuelco sobre vosotros, para protegeros, para apartaros de todo mal, para congregaros entorno a Mí, derramando abundantes Bendiciones y Gracias sobre todos vosotros, según cada uno lo precisa.
Ved el instinto de protección de toda madre hacia sus hijos, también en el mundo animal. Todo eso surge de Mi Amor, porque toda la naturaleza fue hecha por Mi Mano, y Me manifiesta constantemente.
Oh, amados, venid a Mí los que estáis cansados y agobiados, que Yo os aliviaré.
Cargad con mi yugo y aprended de Mí que soy manso y humilde de corazón, y hallareis descanso para vuestras almas. Porque mi yugo es llevadero, y mi carga ligera.
Esa capacidad que os doy, es un don precioso, una especie de instinto sobrenatural; una facultad que os permite, como a los cachorros con sus madres, seguir siempre a vuestro Dios único y verdadero.
Os permite no sentiros perdidos, en medio de la actual apostasía.
Mi Santo Espíritu, que os habita, por la fe y el bautismo, y por medio de todos Mis sacramentos, es la clave de todo.
Quien lo tiene, Me tiene.
Quien lo rechaza, aunque afirme falsamente ser de los Míos, lo sabréis más tarde o más temprano... Ya me ocupo Yo de que sea, cuanto antes mejor.
Pequeños todos, no sabéis cómo en esta época me vuelco sobre vosotros, para protegeros, para apartaros de todo mal, para congregaros entorno a Mí, derramando abundantes Bendiciones y Gracias sobre todos vosotros, según cada uno lo precisa.
Ved el instinto de protección de toda madre hacia sus hijos, también en el mundo animal. Todo eso surge de Mi Amor, porque toda la naturaleza fue hecha por Mi Mano, y Me manifiesta constantemente.
Oh, amados, venid a Mí los que estáis cansados y agobiados, que Yo os aliviaré.
Cargad con mi yugo y aprended de Mí que soy manso y humilde de corazón, y hallareis descanso para vuestras almas. Porque mi yugo es llevadero, y mi carga ligera.
Somos UNO, para Bien de todos. Para que todos sean
UNO también.
Sí amiga, creo que el Espíritu Santo en un nuevo Pentecostés designará a los Suyos y en Él somos Uno, Un solo Espíritu. En cambio, sobre la falsa, los demonios imitarán para tratar de engañar a los santos. Serán días de mucha tiniebla pero tenemos este tiempo para reconocer la Voz del Pastor, ese Sensus que aprendemos en la lectura de las Biblias buenas como la de Navarra, por ahora. Reconocemos al verdadero Pastor. Me pasa cuando me mandan chorradas memes en wasap sobre "Juan Pablo II" o "Teresa de Calcuta" y claro, oigo que no son de Él, pero el que me lo envía... ¿no le ha sonado raro? pues no. Y me decepciono porque veo que hay muchas vías por las que podemos ser envenenados. Abrazos fraternos.
ResponderEliminares cierto, pero nuestro Abba del cielo acaba por hacernos ver la verdad de las cosas, si nosotros aspiramos a ella, de corazón, y permanecemos pequeños, y confiados en Sus Manos.
ResponderEliminarSea lo que fuere que tengamos que pasar, vamos con el Maestro, y Mamá no pierde ojo a sus hijos.
confiemos cada vez más. Cuanto más el mundo le de la espalda a Cristo, más debemos abandonarnos en sus divinos Designios de Amor por nosotros. Ánimo y adelante.
Avancemos
Abrazos fraternos
Puedo dar fe de ello, si se me permite personalizar el comentario. Antes de mi conversión, hace tiempo de eso, era un bautizado de esos BBC, es decir, de bodas, bautizos y comuniones. Más todavía, durante bastante tiempo mi mujer y yo (casados desde los 20 años de ella y los 23 míos y con años de novios antes del matrimonio), ambos bautizados como decía, seguíamos una vida típica del mundo y con incursiones en las lecturas New Age. Me tragué libros y libros, por años, de budismo, meditación, planos astrales, reencarnaciones, etc, etc. Claro, como todos, poníamos también métodos anticonceptivos para no tener más hijos de los que queríamos tener. Jamás, eso sí, tuvimos ningún aborto ni tampoco hubiésemos pasado por ahí, pero sí que poníamos barreras a los hijos que el buen Dios quisiera enviarnos. Pues bien, un día, sin saber cómo ni porqué, entramos a una iglesia. Ahí cambió todo. Todo. Tras asistir un mes, nos confesamos, puedo decir que derramé muchas lágrimas al relatar mis pecados al sacerdote, es decir, a Cristo en la persona del sacerdote. Tras ser absuelto por mis pecados y salir del confesionario, caminé por la calle de regreso a casa como si flotara; como si hubieran quitado mil toneladas de fango de encima de mi. Me supe limpio, me sentí lipio. Experimenté la Sangre de Cristo limpiando mis inmundicias. A partir de ese momento, cada comunión fue vivida como lo que es: Cristo, físicamente, entrando en mi cuerpo y haciéndolo un lugar sagrado.
ResponderEliminarDios, el buen Dios, siempre nos llevó en brazos aún estando lejos, lo vimos y lo supimos luego, era evidente. A pesar de las cañadas fangosas y putrefactas por las que nuestros pies anduvieron, jamás nos permitió Nuestro Señor y Su Santísima Madre la Virgen María caer demasiado hondo. Jamás traspasamos lineas que hubiéramos podido traspasar perfectamente siendo del mundo. Él nos sostenía con un amor tan inmenso y una misericordia tan grande que no puedo expresarla con palabras. Hoy (hace ya años), mi esposa, nuestros hijos y yo, somos de María, y por Ella de Jesús, y como somos de Jesús somos del Padre y todo ello por el Espíritu Santo.
Sí, fuimos a casa del Padre cansados y agobiados, y Él nos hizo descansar cargando todas nuestras miserias. ¡ALABADO SEA POR SIEMPRE SU SANTO NOMBRE!
Abrazos fraternos.
Gracias, hermano, por tu hermosa confidencia. Coincides conmigo en una vivencia especialísima que yo también tuve, despues de mi conversión: la primera confesión hecha conscientemente, después de 10 años de darle la espalda a Dios, voluntariamente.
ResponderEliminarMe llevó el Señor a una iglesia de pueblo, eran las 4 ó 5 de la tarde, la iglesia cerrada, y llamé a la puerta de la casa parroquial. Salió el párroco, le dije que necesitaba confesarme, y, gloria a Dios, no me dijo que no. Entramos en la iglesia, se puso la estola y me confesé.
Me perdonó en Nombre de Cristo y me impuso como penitencia la lectura pausada y meditada del santo Evangelio de San Juan durante 3 meses. Después de los cuales podía hacer mi primera comunión consciente.
Salí de la iglesia y al volver hacia mi casa, por la calle, me sentía flotar, tal y como tú has relatado. Como si me hubieran quitado un grandísimo peso de encima. me sentía como si me fuera a elevar en cualquier momento.
¡Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo, por los siglos de los siglos!!!
Amén.
Abrazos agradecidos