Señor ten piedad de Ucrania

Te pedimos Señor Jesús, por intercesión de santa María inmaculada, que protejas, bendigas y socorras al pueblo que está siendo atacado sin compasión por la gran Rusia, guiada por Putin, ese nuevo zar que cree que puede hacer y deshacer cual dios dictatorial.

Cubre al pueblo ucraniano con Tu Poder y defiéndelos contra la malicia que los asola. Desbarata una vez más los proyectos de los soberbios, y derroca de su trono a los poderosos, como lo hiciste antaño en tantas y tantas ocasiones.

Ponemos nuestra confianza en Tu Reino, en Tu Soberanía Divina que queda sobre cualquier mortal que qusiera erigirse en dios, como ocurre al presente.

Te los encomendamos a todos, protégelos contra la soberbia del fuerte que piensa que Tú no existes y cree que nunca intervienes en las cosas de los hombres.

Miraste la pequeñez de tu esclava María, mira ahora a tantos y tantos que padecen la bota de hierro que los hiere y pretende aplastarlos.

Haz, Señor, que David, una vez más, logre vencer a Goliath y lo deje tendido en el suelo.

Amén.

 

 

El estar en gracia de Dios es una bienaventuranza que comienza ya en este mundo caduco, para desplegarse por completo en la vida eterna.

 

Señor, descanso en Ti

 

 

 

Descanso en Ti, Señor Jesús

Mi vida a Tus Pies

Confío plenamente en Tu Amor

Me centro del todo en Ti y en Tu Santa Voluntad

 

Felices somos los cristianos

Son felices aquellos que procuran vivir según Sus Mandamientos. Porque el Bien llama al bien. Y solo en Cristo halla el hombre el camino recto, honesto, verdadero.

Nuestra común unión con Jesucristo supera cualquier tipo de unión de amor, ya que Él es Dios de Dios, Luz de Luz y Palabra Divina hecha hombre y Redentor.

Sintámonos felices.

Además todo ello revierte en nuestros hermanos, es para Bien de todos.

Llevando tu vida santamente, siguiendo Sus Inspiraciones, es como colaboras con Cristo en el crecimiento de Su Iglesia, Esposa amada Suya.

Hágase en nosotros según Tu santa Voluntad, Señor.

Descanso en Ti, Señor.

Me abandono en Tus Manos santas.

Las cosas de arriba

Las cosas de Dios, las de Arriba, solo en Su Palabra, en Cristo mismo, hallan su expresión más acertada.

 

Cualquier concepto divino que el hombre quiera expresar resultará muy dificultoso e incluso imposible, si no busca en Él la manera acertada de formularlo.

Porque las cosas del Cielo son muy distintas a las cosas de aquí abajo. En un mundo bajo la bota inmisericorde del maligno, la realidad queda transformada bajo mil velos de mentira, dolo y malicia.

Solo el hombre puro podrá ver a Dios.

 

  

Solo el hombre que ha sido purificado de su propio pecado, halla en sí mismo esa Luz que es Cristo mismo y que le capacita en mayor o menor medida, según su entrega, para las cosas de Arriba.

¿Dónde hallo Yo, Sabiduría eterna e inmutable, un corazón limpio en el que poder habitar, al que poder llenar de Mi Verdad, Luz y Vida eterna...?

 

 

Soy pecador infiel

 

 

Todo pecado es fundamentalmente contra Dios, aunque incluya un pecado contra el prójimo ó contra uno mismo.

Yo soy es el Legislador supremo, Creador y Dueño de toda la creación. Por lo tanto cualquier ofensa es un acto malo que Le ofende a Dios.

No quiero pecar más contra Ti, mi Dios y Señor. Dame Tu Gracia omnipotente para poder conseguirlo y así comenzar a agradarte en todo.