viernes, 30 de octubre de 2020

domingo, 25 de octubre de 2020


Amados, se acercan tiempos difíciles, porque los hijos de la tiniebla han decidido que sois demasiados como para que ellos puedan disfrutar de la vida lujosa que quieren llevar. Si las dos guerras mundiales incluyeron planes de exterminio, esos mismos planes abarcan la mayor parte de la humanidad.

Por lo que orad, orad a tiempo y a destiempo, confiad en Mi para toda necesidad, porque Yo os reúno a todos los que Me amais y os cubro con Mi Manto protector, con Mi Sangre divina, para que no os dañen.

Sois Mi rebaño, Mi amada Iglesia, la que está formada de personas que creen en Mi y Me aman, orientando sus vidas según Mis Enseñanzas, a lo largo de todo el planeta.

Se despliega una tiniebla espesa sobre las mentes y los corazones de aquellos que Me rechazan, de tal forma que teniendo ojos, no Me ven, teniendo oídos, no Me escuchan, sino que hallan en sus pasiones su minuto de placer, que luego se les convierte en amargura.

Amados, son tiempos difíciles, globalmente difíciles, más Yo no marcho, nunca marché, para el que cree en Mi, Yo sigo junto a los Míos, bendiciéndolos, protegiéndolos, y conduciéndolos hacia la Vida eterna.

Os aviso con tiempo para que no os pille desprevenidos, y podáis fundamentaros totalmente en Mi.

Nunca abandono a los Míos.
Yo Soy es el único Dios verdadero y se acerca el dia en el que todo lo recapitularé en Mi mismo, juzgando con Derecho Divino las obras de unos y otros. Pronunciando la sentencia definitiva y justa y misericordiosa, la única verdadera.

No tengas miedo, Yo he vencido, una vez y para siempre.

ut UNUM sint

martes, 13 de octubre de 2020




Mis pequeños, en estos momentos históricos en los

que han colapsado la estructura temporal de Mi

Iglesia, perjudicando grandemente a las almas,

predicándoles doctrinas de hombres que les

apartan de la Verdad, hallo consuelo en

vosotros, Mis amados pequeños, que no

ambicionáis grandes cosas, sino tan solo estar

Conmigo, amarme y obedecerme.


Soy UNO con todos vosotros, Me pertenecéis por

un acto libre y voluntario de adhesión amorosa a

Mi Persona. Y Yo os hago Míos, con toda Ternura,

como una madre buena acomoda a sus hijitos bajo

su protección.


No Me importa que seáis pequeños e insignificantes

para el mundo, eso no tiene importancia. lo

importante es que vuestro Dios y Señor os ama con

Amor divino y humano, os cuida y provee todo lo

necesario para todos vosotros.



Soy Padre Bueno, Padre Santo y soy Dios, que

cuido a los Míos, siempre, y aún cuando vuestra

realidad os diga lo contrario.



Este mundo vuestro ha sido tomado por el

maligno, pero se acerca el momento histórico en

el que Yo mismo recapitularé todas las cosas,

todo lo creado, bajo Mi Imperio universal.



Nos unimos cada dia más y mejor, aunque

no lo percibáis. Así es, y no solo es por vuestro

bien, sino que es un bien para todo Mi Cuerpo

místico, Mi Iglesia, porque el Espíritu Santo

hace que todo bien se difunda entre todos los

que se hallan en Mi Gracia.


Amados, recibid Mi Bendición de hoy, extensiva a
vuestras familias, amigos, conocidos, a todos.


somos UNO


domingo, 11 de octubre de 2020

Amarás al Señor tu Dios con toda el alma y con todo el corazón

 

Si mirando hacia adentro, no hallares al Amado, 

llámale, dile que le amas y esperas, con ansia de estar con Él.

 


 

Es bueno que dejándolo todo, dejando a toda criatura, 

Le busquéis en la soledad y en el silencio. 

Allí se deja hallar.

Pues tiene Su Alegría en estarse con aquellos 

a los que ha rescatado de la muerte.

 

viernes, 2 de octubre de 2020

Santos ángeles de la Guarda, gracias de corazón

 


 

Santo Tomás de Aquino, al ordenar la jerarquía angelical decía: 

“Los Serafines, Querubines y Tronos, forman la augusta corte de la Santísima Trinidad; las Dominaciones presiden el gobierno del Universo; las Virtudes, la fijeza de las leyes naturales; las Potestades refrenan el poder de los demonios; los Principados tienen bajo su amparo a los reinos y naciones; los Arcángeles defienden a las comunidades menores, y los Ángeles guardan a cada uno de los hombres.“ 

 

 


 

 Así es el Amor de Dios: siempre enriquece y nunca defrauda