domingo, 29 de agosto de 2021

 

 


Como la madre alimenta a su hijito con cariño y alegría, así te alimento Yo, día tras día, con todo lo que precisas para ser mi discípulo y aprender Mi Ley.

 


 

"ut Unum sint", que todos sean Uno en Mí y Conmigo y así todos juntos amemos al Padre eternamente haciendo siempre Su Santa Voluntad que es la Mía también.

 

lunes, 23 de agosto de 2021

Ten Paz

  


 

de Mí saliste y a Mí vuelves, ten Paz por el camino que Yo voy contigo, siempre, en todo momento.

 

 

domingo, 22 de agosto de 2021

Palabras de vida eterna

 «Señor, ¿a quién vamos a acudir? Tú tienes palabras de vida eterna; nosotros creemos y sabemos que tú eres el Santo de Dios».

Santo Evangelio según san Juan 6,68-69

 


 

 

Todo lo que el corazón del hombre ansía encuentra la Respuesta adecuada e incluso sobreabundante en Jesucristo.

Para poder decir esto con verdadera convicción, ¿ Qué debo hacer ?

Cuando hallo, en mi caminar por este mundo, a una persona en la que veo mucho de lo bueno que constituyen mis valores, procuro hablar con esa persona y tratar de conocerla mejor.

Sin conocer bien a una persona no podré decir que es amiga mía.

Lo mismo ocurre con Dios. Si quiero amar más a Jesús, es normal que procure conocerle mejor.

¿En qué hallo la manera de conocer mejor a Jesucristo?  Leyendo y meditando con frecuencia Su Palabra y Su Vida terrena descrita en los Santos Evangelios. Una vez haya yo prestado mi sí incondicional al Jesús de los Evangelios, Su Santo Espíritu y la Virgen María me conducirán suavemente hacia una vivencia plena del Sacramento de la Reconciliación, en el que soy perdonado y agraciado con nuevas capacidades para hacer el bien y desechar el mal. Podré comenzar a amar al prójimo como Dios me lo pide.

Una vez afianzado en Cristo, vendrán las Santas Misas, la Santa Comunión, , las oraciones diarias, el santo Rosario, la santa Coronilla, y las santas lecturas de también santos libros.

Mi anclaje principal es el Cristo de los santos Evangelios. Es imprescindible leerlos con frecuencia, a diario a ser posible, para perseverar en Su Amor y Conocimiento hasta el final de nuestra vida mortal y más allá.

sábado, 14 de agosto de 2021

Assumpta est Maria in caelum: Gaudent angeli, laudantes benedicunt Dominum

 

 


 

 

"Después de elevar a Dios muchas y reiteradas preces y de invocar la luz del Espíritu de la Verdad, para gloria de Dios omnipotente, que otorgó a la Virgen María su peculiar benevolencia; para honor de su Hijo, Rey inmortal de los siglos y vencedor del pecado y de la muerte; para aumentar la gloria de la misma augusta Madre y para gozo y alegría de toda la Iglesia, con la autoridad de nuestro Señor Jesucristo, de los bienaventurados apóstoles Pedro y Pablo y con la nuestra, pronunciamos, declaramos y definimos ser dogma divinamente revelado que La Inmaculada Madre de Dios y siempre Virgen María, terminado el curso de su vida terrenal, fue asunta en cuerpo y alma a la gloria del cielo". 

Papa Pío XII, el 1º de noviembre de 1950

 

 

domingo, 8 de agosto de 2021

"Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo; el que coma de este pan vivirá para siempre.
Y el pan que yo daré es mi carne por la vida del mundo."

(Santo Evangelio según san Juan 6, 50-51 )

 


Más claro, imposible. El Pan que Jesucristo nos da para que vivamos eternamente con Él, es Su Carne.

Y la Iglesia católica, de nuevo, tiene razón.

¿Cómo nos da ese a comer su carne? Esta misma pregunta se hacen los que ya no creen en Su santa Presencia real en la santa Hostia consagrada. Esos que por no creer se separaron de la Iglesia católica y se inventaron su propia iglesia.

Cuando comemos Su santísima Carne, bajo los velos de un trozo de pan, acogemos en nosotros Su eterna Salvación. Esa vida sin fin que el UNO y Trino nos ofrece en Cristo, por medio de la Inmaculada.

Señor, aquí estamos, con toda nuestra miseria, deseando no volver a pecar contra Ti nunca más. Danos Tu Pan para que lo logremos. Amén.