Para orar serenamente, primero busca soledad y silencio.
Fuera móviles, teles, radios, etc...
Estás solo, invoca al Señor que mora en tu corazón.
Pide asistencia a la Virgen Inmaculada.
Renuncia a tus intenciones, déjate llenar de su Paz, recordando aquel: "Paz a vosotros" , con el que siempre saludaba.
Olvida todo. Estás con el "Yo Soy" de los siglos.
Hazte consciente de que tú eres en el Dios uno y trino que amas, y que Él es Uno contigo, porque te ama infinitamente.
Dile: " Tú en mi y yo en Ti "
Repítelo, sosegadamente.
Deja que Su Paz te invada.
Vive el momento, simplemente recíbele.
Disfruta hondamente de lo que Dios en Jesucristo haga en ti.
Has orado, sé feliz.
Magnífico aunque no siempre hay frutos inmediatos..ásperos desiertos con oraciones silábicas, me lo apunto para los ratos en soledad. Y en familia ya sabemos que Él está como también mamá en el rezo del Santo Rosario y en la liturgia de las Horas estamos todos, con toda la Iglesia. Abrazos fraternos.
ResponderEliminarAhora veo que es el Monte Sinaí, tienes razón, qué importante es seguir por María las huellas de nuestro Maestro y Subir a la Montaña a Orar desprendidos como niños. Abrazos agradecidos.
ResponderEliminarY hazlo en lo secreto, pues el Padre escucha y ve en lo secreto de tu alma. Magnífica, magnífica la oración que has escrito.
ResponderEliminarAbrazos fraternos.
No siempre hay frutos inmediatos, pero Él siempre está porque siempre ES. El santo Rosario, procuro rezarlo, pero reconozco que me cuesta un poco. Si somos UNO con Jesús, somos UNO con todos los que le aman en el cielo, el purgatorio y la tierra.
ResponderEliminarAbrazos fraternos
Me alegro que te agrade, Peregrino. Orar así ayuda mucho a vivificar la propia vivencia de Fe.
Abrazos fraternos
"Tú en mi y yo en Ti "
ResponderEliminarQue locura de Amor, puede haber más grande...
¡Feliz Mayo.! Mes de María nuestra Madre.
Un fuerte abrazo en el Señor