" En aquellos días, Abrahán cayó rostro en tierra y Dios le habló así:
 
«Por mi parte, esta es mi alianza contigo: serás padre de muchedumbre de pueblos...»



¿Has caído rostro en tierra alguna vez, para adorar al Señor?

Eso sólo lo hace quien, de verdad, cree y respeta la altísima dignidad del Creador de todo cuanto existe.

Este movimiento interior y exterior de adoración, sujeción y reconocimiento de la propia pequeñez ante la infinita Dignidad del Uno y Trino es un hábito perdido en nuestras sociedades tan cultas, tecnológicas y avanzadas...

Cuando no somos capaces los creyentes ni de arrodillarnos durante la consagración del pan y del vino en la santa Misa, ¿qué clase de conciencia del propio pecado hemos permitido que se difunda entre nosotros?

¿Hacía falta una pandemia para que bajáramos de nuestros pedestales de soberbia, sintiéramos nuestras limitaciones, para acudir al Todopoderoso?

Pues sí, parece que ha sido necesario.

Hoy me han pasado un video en el que famosos cantan aquella canción: Resistiré, y me pregunto si lo que quieren es resistir al coronavirus, a base de convicción, ó acaso resisitir a Dios que permite que se sientan vulnerables?