miércoles, 10 de junio de 2020
Acción interior
De lo antiguo, hago algo nuevo,
de lo enquistado, hago un terreno fértil
y siembro Mi Palabra que cual buena simiente, germina,
y enraíza en lo más hondo del alma.
Una vez allí, contempla algunas malas hierbas,
que anidaron antaño en el alma,
y le impiden ir creciendo en la Verdad de Dios.
Mi Labor es lenta, más fructífera,
libero, sano y limpio
las estancias más recónditas.
Espíritu Santo y Divino,
silencioso, apenas perceptible,
que cual Brisa suave se lleva para siempre,
lo abyecto, inmundicia que impide
una Redención completa.
Actúa Divino Médico y recréanos,
mientras en fe andamos por la vida,
sin darnos cuenta, actúas, y Tu Labor permanece.
Gloria a Ti, oh divino Jardinero,
oh Médico de excelencia,
que te ocupas con tanto esmero,
de nuestra mortal existencia,
y nos conviertes en hijos
en unidad y Vida eterna.
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Que haga todo lo que sea necesario en mi corazón este amable Jardinero, para sanar. Loado sea mi Señor. Abrazos fraternos.
ResponderEliminary en el mio también. Loado sea para siempre.
ResponderEliminarAbrazos fraternos