¿Tienes sed de Dios?
Toma y bebe.
Más sólo un vaso lleno de agua puede desbordarse y ofrecer agua más allá de sí mismo.
Por eso tu primer tarea es dejarte llenar por Dios de su Agua, de su santo Espíritu, de tal forma que rebose en ti, y así puedas ofrecer agua al sediento, Espíritu Santo al que anda muerto.
Ambicionemos ese desbordar de Agua divina, que por parte de Dios no queda. Si somos hechos UNO con Él, también Él que es el Vencedor de la historia, nos llena de sí mismo, de su santo Espíritu para que su Agua divina brote, llene y desborde magnánimamente más allá de lo que podamos imaginar.
No importa cuan torpe sea yo, Él en mí PUEDE.
"«El que tenga sed, venga a mí;
ResponderEliminary beba el que cree en mí».
Como dice la Escritura:
De su seno brotarán manantiales de agua viva.
Él se refería al Espíritu que debían recibir los que creyeran en él. Porque el Espíritu no había sido dado todavía, ya que Jesús aún no había sido glorificado." San Juan 7, 38-39
Él PUEDE! qué alivio más grande luchar por ser UNO con Él.
Abrazos fraternos.
Oh, sí, hermano, más yo diría que es quizás más un dejarse llenar, con los dolores que eso conlleve, purificación, que algo que uno pueda hacer. Diría que es primero estarse con Aquel que tanto nos ama, escucharle en la intimidad del Corazón y tras ello, vivir cuanto se nos haya comunicado, y ver como Él siempre va delante. Un buen amigo mio me lo decía con frecuencia.
ResponderEliminarDe todas formas, cada alma es un mundo, y a cada uno nos conduce por la vereda adecuada.
Gracias por tu compartir, como decía siempre nuestra hermana Flor del silencio. ¿Callada del todo?
Oremos.
Abrazos fraternos